Infraestructuras ferroviarias

La construcción del nuevo Bilbao requería la eliminación de la barrera que suponía el trazado ferroviario junto a la Ría y ésta fue la primera gran obra acometida por BILBAO Ría 2000 tras su fundación.

La retirada de las vías, junto con la desaparición del astillero Euskalduna y el traslado de las infraestructuras ferroviarias y portuarias preexistentes, permitió el acercamiento de la ciudad a la Ría ganando para los ciudadanos unos espacios que fueron claves en el nacimiento del nuevo Bilbao.

En paralelo, la construcción de la Variante Sur Ferroviaria entre San Mamés y Abando, aprovechando un trazado de mercancías, mejoró la operativa ferroviaria y supuso la construcción de nuevas estaciones en zonas de Bilbao a las que no llegaba el ferrocarril, ofreciendo mejoras de transporte público a la ciudadanía.

Además, el cubrimiento de las vías dio paso a la construcción de un boulevard en la Avenida del Ferrocarril y al consiguiente cierre de una brecha urbana centenaria en pleno centro de la Villa en aras de un urbanismo más equilibrado y amable.

Dentro de esta intervención se construyeron las estaciones de Zabalburu, Ametzola (con servicio a dos líneas de pasajeros), Autonomía y el intercambiador de San Mamés y se remodeló la de Abando.

BILBAO Ría 2000 ha llevado a cabo otras obras ferroviarias, como la construcción de las estaciones de La Peña y Miribilla (antes inexistentes) y una nueva estación en Santurtzi, que sustituyó a la anterior.

También sobresalen las dos fases del soterramiento de la línea de Adif Ancho Métrico a su paso por Basurto, Rekalde e Irala, que son la piedra angular de la actuación Basurto-San Mamés.

En total, BILBAO Ría 2000 ha procedido a la integración urbana de 4 kilómetros de línea férrea que anteriormente ejercían de barrera entre diferentes barrios de la ciudad.